Existen tres grandes opciones dentro del cloud computing. Diferenciamos clouds privadas, públicas e híbridas.
La nube privada consta de una infraestructura demandada y gestionada por un cliente, y es quien tiene el control de esta –aplicaciones, etc–.
En el caso de las clouds públicas, la gestión de la infraestructura la llevan a cabo terceras partes, ajenas a la organización. Se comparten los servidores, datos, etc.. con otros clientes, pero no son conocedores de datos almacenados ajenos a ellos.
En el caso de las clouds híbridas se combinan partes de cada una de las anteriores para realizar diferentes funciones. Una de las ventajas de este modelo es el hecho de poder utilizar, por ejemplo, la nube pública para maximizar la eficiencia, y la nube privada para aquellas operaciones que requieran un mayor grado de seguridad, estabilidad e integración.
Existen diferentes maneras de combinar ambos servicios, ya sea a través de un paquete completo que incluya las dos clouds, contratar por separado los diferentes modelos, etc. Por tanto, aquí tendríamos una segunda ventaja, y es la de ahorrar en funciones y no hacer un desembolso tan elevado, ya que las clouds privadas exigen un mayor capital de entrada.
Objetivos
El hecho de segmentar los objetivos es una de las razones por decantarse por las híbridas, ya que se puede utilizar la nube pública para el negocio con los clientes, y la privada para una gestión interna, con una mayor seguridad.
Todo apunta a que el cloud computing es el modelo que elegirán las grandes empresas en un futuro próximo. Hablando de cifras, la consultora Forrester espera que el mercado global de cloud pública ascienda a los 146.000 millones de dólares en 2017. En 2015, el volumen de negocio se situaba en 87.000 millones, por tanto el aumento es muy notable.
En este estudio, del total de grandes empresas norteamericanas encuestadas, el 59% se decanta por el cloud híbrido, por el privado un 38% y un 32% por el cloud público. Aún así, se especula sobre que aquellas empresas que actualmente utilicen el modelo privado, acaben migrando a la nube pública, por razones de tiempo y precio del trabajo realizado.
Previsiones para las clouds
En 2020 se espera un aumento hasta alcanzar los 236.000 millones de dólares. Las grandes compañías que ofrecen este tipo de servicios, como pueden ser Amazon Web Services, Microsoft, IBM, Google, Salesforce, Oracle, SAP, etc. quieren marcar el camino para la adopción del cloud computing.
A fin de cuentas, el tipo de nube a usar va ligado a las necesidades de cada empresa u organización, dependiendo de la seguridad que requiera, de la accesibilidad de la información, del presupuesto a invertir en estas infraestructuras o al tipo de industria que pertenece.
