Muchas veces tendemos a pensar que los avances tecnológicos que ayudan a cambiar el mundo o mejorar la vida de las personas son patrimonio exclusivo de las primeras potencias.
Este sesgo, arraiga en forma de techo de cristal en las nuevas generaciones, creando un escepticismo generalizado que no promueve la motivación de nuevos referentes locales en innovación tecnológica.
Por ello, queremos traerte en este post, casos en que desarrollos “made in Spain”, están cambiando la vida de millones de personas alrededor del mundo y devolviéndoles la sonrisa.
Según el índice de innovación de la revista económica Bloomberg, España se encuentra en el puesto 31 de su clasificación anual sobre las economías más innovadoras del planeta:
Fuente: Bloomberg
Inspírate con estos casos, es tiempo de volver a creer en nuestro talento:
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The Blue Box: la revolución española contra el cáncer de mama
Judit Giró, es una ingeniera biomédica terraconense que, junto al informático taiwanés, Billy Chen, han creado The Blue Box, una startup que ha nacido con el propósito de dar solución a una de las enfermedades que más afecta a las mujeres, el cáncer de mamá.
The Blue Box es un dispositivo biomédico basado en IA, que detecta el cáncer de mama en una fase precoz, a partir de una muestra de orina. Gracias a su desarrollo, la joven española, en noviembre de 2020 ganó el concurso internacional de The James Dyson Award.
Nos encanta este caso, no solo por el gran avance que supone para una problemática que causa tanto dolor en miles de familias, sino porque Judith Giró, a sus 24 años, ha echado por tierra un doble sesgo: que no hay referentes femeninos en tecnología y que en nuestro país somos IT adopters, más que IT creators.
Aisoy. Desde Elche al mundo, combatiendo el autismo infantil
En el podcast Solaris, Jorge Carrión narra el caso de un niño que sufre autismo no verbal y a los 11 años no es capaz ni de decir “hola”. Sus terapeutas no logran que encuentre estrategias para comunicarse, en el colegio cada vez está más aislado y más triste y en casa más agresivo.
Su madre busca opciones por internet, pero todas son muy caras y no puede permitírselo. Una noche, mientras está dormido, navegando por la red, descubre Aisoy, lo fabrican en Elche y cuesta solamente, 300 dólares.
11 días más tarde reciben el robot de 40 centímetros con aspecto de mascota o de Doraemon, a los pocos días, dice por primera vez la palabra “Hola”. Semanas después, ha aprendido algunas palabras clave que le permiten acceder a una incipiente comunicación verbal.
Algunos meses más tarde, ya es capaz de controlar sus reacciones a emociones que antes no sabía cómo gestionar.
Aisoy, también tiene un programa calmante que consigue que reduzca sus enfados de horas, a pocos minutos. Se ha vuelto un miembro indispensable de la familia.
El objetivo de Aisoy es penetrar en la esfera de confianza del niño. Es un robot que entretiene y enseña a través de la tecnología avanzada de IA.
Aisoy fue creado en España en 2009, por su Co-Fundador y CEO, José Manuel del Río, quien se define como un soñador que, desde niño, ha tenido pasión por la tecnología y los videojuegos y siempre ha soñado que algún día los robots de las películas que veía de niño serían una realidad.
Nos cautiva este caso donde tecnología pura y dura como la IA puede mejorar algo tan humano como la conexión entre una madre y un hijo, o la capacidad de comunicación de un niño.
Aimentia. IA española contra la enfermedad mental
Edgar Jorba, un estudiante de grado de Ingeniería de tecnologías y Servicios de Telecomunicación de la Universitar Oberta de Catalunya (UOC) con tan solo 26 años, ha creado Aimentia, una clínica virtual que emplea IA para salvaguardar la salud mental de los españoles.
Edgar, tras trabajar en una clínica de psicología en Barcelona, se dio cuenta de la pandemia invisible que supone la salud mental. Estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aseguran que en 2030 los problemas de salud mental serán la principal causa de discapacidad en el mundo. Saber que los profesionales muchas veces carecen de las herramientas necesarias para ayudar a sus pacientes, lo impulsó a emprender.
La app de Aimentia utiliza algoritmos que son traducidos en datos útiles para los profesionales sanitarios, pero ideada para ayudar principalmente a los pacientes.
Además, durante el estado de alarma desde Aimentia se desarrolló un módulo de emergencia 24h de asistencia psicológica. La plataforma está dividida en diferentes módulos de forma que cada uno de ellos tiene específicamente un trastorno.
Así, casos como Aimentia, nos demuestran las ventajas que la era tecnología nos ha aportado, entre ellas, la existencia de este tipo de herramientas que ayudan a combatir patologías propias de la mente humana a través de la IA.
Marsi Bionics. Tecnología robótica para mejorar el funcionamiento muscular
Elene García Armada, CEO de Marsi Bionics, Centro de Investigación y Terapia Asistida por Robots en Enfermedades Neurológicas, es una ingeniera industrial vallisoletana y una de las mujeres más destacadas en el campo de la robótica mundial.
El éxito del exoesqueleto pediátrico que han desarrollado se debe a su innovación tecnológica, ya que está formado por 10 articulaciones las cuales tienen la capacidad de poder interpretar la intención del movimiento del paciente, adecuándose específicamente a cada uno de ellos.
El modelo sustenta al niño desde el tronco hasta los pies y sus dimensiones son fácilmente ajustables al crecimiento de cada niño. Otra de sus grandes ventajas es que se coloca en el paciente en menos de cinco minutos y viene acompañado de una Tablet donde se recogen todos los datos de la marcha de quien lo utiliza.
Si bien Marsi Bionics no contaría como Software, es una innovación tecnológica con un tremendo impacto en la calidad de vida de las personas afectadas por enfermedades neurológicas, ¿Qué menos que darle difusión?, es nuestra pequeña forma de agradecer el esfuerzo detrás de un proyecto con talento local, enfocado en en un propósito con foco en personas vulnerables que devuelve la ilusión a miles de familias.
Estos desarrollos “made in Spain” nos recuerdan la necesidad de proteger el capital detrás de nuestro talento, para frenar la fuga al exterior y fomentar su crecimiento para juntos construir un futuro más próspero para todos.